BLOG DE BEATRIZ GRACIELA MOYANO "Bienvenidos a mi nuevo desván"

UN BLOG DE BEATRIZ GRACIELA MOYANO
"BIENVENIDOS A MI NUEVO DESVÁN"
A todo aquel visitante de éste mi nuevo desván les
doy la bienvenida, un nuevo refugio a la nostalgia,
siempre en la búsqueda de oscuridades lumínicas
que me habitan y se escabullen de mi propio Yo.
Lugar donde pretendo volcar fragancias y colores en el cántaro de sentipiensos.

lunes, 2 de enero de 2012

CAMALOTE





CAMALOTE

A la deriva por el cauce de canales del río, en viaje de color desteñido por el sol abrasador de sueños perdidos, va el camalote viajero de agua dulce, costeando solitario en la intrépida y demencial partida, a la aventura exploradora de profundidades que verá desde arriba, flotando, entregado a la apasionada y turbulenta carrera del río y sus afluentes, florece de celestes liliáceos como el cielo, bebiendo y pariendo hojas en extendido y carnoso verdor con purpurina desafiante a un cielo estrellado en una noche de verano encendido, en la esencia más pura y salvaje, de amar navegando libre, perezoso y placentero, camalote flotador, sol y nido, guirnaldas y collares, cuando el paisaje agreste subyace en él, tapiando brazos bautizados de las islas, va más lento, mientras crece y crece. Paraná, río bravo, amigo, amante, sueño pescador con frutos codiciados en sus redes, surubí, patí, sábalo y dorado saltador, jugueteando voraz en complicidad natural con la carnada tornasol que se expresa con total esplendor, atrevido pez brillante y burlón de fuerza y pelea por seguir las aguas turbias arcilladas. Y el camalote encaramado, solícito y solidario, presto a transportar en sus tupidas ancas a serpientes coloridas, que como templos paganos en movimientos se lucen ondulantes, cual cadera de hembra en celo, alertas vigilantes nocturnas y el camalote aquí en la aventura de vivir el Paraná, misterio de corrientes dulces, oscuras, claras a veces como los pensamientos que pululan en las mentes vagabundas, destino final el mar, donde lo lleva el ancho y brioso caudal de su río por los canales profundos y los dudosos remansos guitarreros, litoral acariciado hasta agotar el calificante poético. Es largo el viaje pero férreo en su destino de camalote azotado variable en su figura cuando el salobre espumoso lo sacuda y desmembre, sin remedio, juntará sus verdores uno a uno para rearmarse y seguir costeando playas hasta reconocer la silueta amada en su silente letargo de nostalgias.

Beatriz Graciela Moyano
02-01-2012
Rosario. Santa Fe
Agentina

2 comentarios:

  1. Como ese camalote de tu pintoresco y atrayente relato vamos a veces por la vida,arriesgándonos en las turbulentas aguas .Pero lo importante es avanzar.Gracias por este bello regalo poético.

    ResponderEliminar
  2. Gracias a vos Elsi, por estar siempre, alentando, animando con tus comentarios. Un beso grande amiga.

    ResponderEliminar